domingo, 11 de enero de 2015

GR10x 2015 - Épica.

Llegaba por fin la última carrera de mi temporada 2014. Sí, sí, ya se que estamos en 2015 pero yo considero a estar carrera la última de la temporada. Desde el comienzo del año no tenía claro si participar, pero impulsado por el gran avance en mi estado de forma me decidí a participar para ver si era capaz de parar el cronómetro sobre las 12h, una ilusión que siempre me ha hecho en esta carrera. Sin embargo, nada más apuntarme viene las noticias de que se utilizará la variante que añade 5km más y D+600m en el recorrido con lo que el sueño se trunca. Pero ya puestos en materia no nos quedaba otra que participar.



Según la previsión meteorológica el día iba a ser extraordinariamente caluroso para la época y la zona final donde se adentra la carrera, cosa que es de extrañar. Con este tiempo tan benévolo decido llevar poca carga en la mochila, solamente el cortavientos y ya está. El resto todo puesto con ropa de quita y pon (pantorrilleras, manguitos, guantes, buff). Las sensaciones al inicio son muy buenas, creo que llego en un estado de forma magnífico...

...y así fue, se da la salida y con poco esfuerzo me mantengo entre las primeras posiciones (sobre el 40 de 300) desde el pistoletazo de salida. Voy regulando, no llevando altas pulsaciones y sin embargo mi avance es decidido y bastante rápido. Incluso he mejorado algo en las bajadas con lo que no pierdo tanto tiempo, aunque en la primera de ellas una piedra bien grande salta y me rebota en todo el tobillo causándome gran dolor). Se pasan las dos primeras subidos muy rápido y yo me encuentro fenomenal, comiendo cada poco y regulando muy bien, y así casi sin enterarme llego a Segart a las 7:55am donde ya puedo quitarme el frontal y guardarlo en la mochila.

De Segart a Serra tenemos la conocida canal del Garbí, que hay que tomar con tiento, puesto que está al comienzo de carrera y la subida agota bastante los cuadriceps por la trepada, por eso la hago sin forzar demasiado y me dispongo ya con día totalmente claro a bajar hacía Serra al primer avituallamiento serio. Tras la rápida bajada llego a este en 3:05h, las previsiones se cumplen muy bien, ya que es lo más rápido que he llegado a este avituallamiento nunca. Recargo agua y como algo y salgo hacia la temida variante, que además de añadir kilómetros y desnivel es algo cansina. Además hay algunos trozos de sendas con muchas raíces y peralte y hay que ir con cuidado de no tropezar y lastimarse.



El día ya se está asentando y comienza a hacer calor, mientras avanzo bastante rápido corriendo incluso por las pistas en subida. Las pantorrilleras empiezan a molestarme y me las bajo para que no me de calor y no tenga la sensación de gemelos apretados. Sigo corriendo y se hace largo el pedazo, pero asombrósamente llego a la masía de Tristán en 5h y 6:05h a Gátova. Increíble con la variante larga y la de las peñas de Guaita es mi record personal de llegar a este punto. Me encuentro freso y voy con la primera mujer de carrera, sin síntoma de fatiga ni molestias (relativas, solamente algo ya de cansancio normal). En el avituallamiento me como dos sandwiches de jamón y queso con dos plátanos y recargo agua además de beber y salgo rápido a encarar la segunda parte de carrera. Tal y como me encuentro veo factible llegar de día a meta, fantástico. Nada más salir de Gátova tenemos una primera subida relativamente dura porque se hace tras comer y comenzando a subir en ella empiezo a tener mucho calor y sed, tanto que justo al acabar esta subida hay una fuente y pego un trago enorme de agua.

Por fin estoy en la zona que tanto esperaba, la larga pista de 11km para correr a muerte...y empiezo a correr bien, pero me empiezo a notar extraño. Comienzo a beber y cada vez que bebo un sorbo mi estómago parece que crece, que se llena de agua. El calor aquí es agobiante, en un altiplano a mediodía con pista amarilla y algo de aire húmedo perfectamente podemos tener una sensación de 30º. Y para colmo, mi mayor error es no parar a comer algo sólido, sino optar por un gel que nada más tomarlo resulta ser mi perdición. Comienzo a beber y mi estómago cada vez más hinchado y comienzo a sentir molestia y dolor cuando corro, como si dentro del estómago llevase agujas. Me vengo abajo, puesto que tengo fuerza para seguir corriendo rápido pero es correr y venirme dolores...comienzo a caminar ya todo el rato. Y encima entro en el círculo vicioso de beber por la calor, el estómago hincharse más y dolor más...



...hasta el momento que a falta de 3km me quedo sin agua. Madre mía, si me considero que bebo poco y me he bebido toda la reserva, como debe ir el resto. Me toca parar a intentar comer bajo una sombra pero no puedo, mastico y no trago, al no comer comienzo a perder energía y así es imposible avanzar. Llego a duras penas al avituallamiento de Montmayor en 9h, pero voy roto, fatal. Allí me siento un buen rato a intentar comer, pero apenas me entra un pedazo de tortilla de patata y tomo mucha coca-cola, con la esperanza de que al menos el azúcar me sirva de energía y que el gas me sirva para aliviar mi estómago.



Salgo, y los dolores corriendo ya son insoportables...intento correr y voy con fuerza pero el estómago pesado. Encima para a orinar y me asusto un montón, puesto que el color es lo más oscuro que me he visto yo nunca. Y no puedo comer, me toca pararme de vez en cuando a intentar hacerlo pero es tarea imposible. Llego mendigando a Sacañet, donde llego algo mareado. Me siento dentro unos 10 minutos, pienso en retirarme que el dolor es brutal, y vuelvo a intentar tomar coca-cola como única forma de tener energía. Allí Javi Galindo me dice que es posible que en el próximo avituallamiento me de un Meritene (ahora se lo que es). Y salgo hacía Canales fastidiado, aunque poco a poco me voy encontrando mejor. La temperatura ha bajado mucho y eso es un alivio. Me cuesta horrores, pero llego a Canales, donde allí si tengo a los míos. Me ha costado llegar mucho hasta aquí y no pienso abandonar. Me siento dentro y Javi llega con ese Meritene (una especie de batido de carbohidratos y proteínas) que me tomo en un segundo. Y misteriosamente, recupero la energía en 5 minutos, mis molestias estomacales van remitiendo cada vez más, la sensación de hinchazón va bajando...y me pongo a correr con una energía brutal!, que lástima. Alcanzo a corredores que me habían pasado y voy tan encendido hacía meta con una sensación de lo que podía haber sido que incluso me pierdo y me confundo varias veces perdiendo algunos minutos. Veo que puedo ser sub-14h si me esfuerzo, pero esas pérdidas me lastran y casi es imposible....pero no, llego justamente 13:59,59 jajaja. Si bien tengo una cara de pena, de piernas estoy nuevo.



Ya como resumen. Me voy a la ducha y mientras la gente le viene justo quitarse la ropa, yo podría hacer perfectamente una clase de flexibilidad...¿qué ha pasado?. Estoy triste y alegre a la vez muy raro. He desaprovechado una ocasión magnífica, aun así he quedado el 63 de 300 participantes y de 220 finishers (el resto retirados por problemas también de deshidratación). Sensaciones encontradas. Estos problemas son imposibles de controlar, aunque también llegaba el final de una temporada muy muy muy larga, donde en resumen me puedo dar por satisfecho. Ahora toca descansar, perder la forma y pensar en la temporada que viene. Esperemos que sea mejor!.